Se hace un estudio exhaustivo de una finca para poder obtener el máximo rendimiento al potencial de sus recursos.
Una vez estudiados todos los aprovechamientos potenciales de la finca, como pueden ser: caza, pastos, leñas, frutos, montanera, biomasa, micología, recreo, apicultura, e.t.c., se realiza el estudio de viabilidad de caza aprovechamiento, analizando la rentabilidad de los mismos y la compatibilidad entre ellos, para ello se estudia la inversión necesaria para conseguir el óptimo del aprovechamiento y su amortización en el tiempo mediante el correspondiente estudio económico.